Seguramente has visto en casa de tus padres o de tus abuelos electrodomésticos que tienen más de dos décadas y que siguen funcionando como el primer día. Y alguien ha dicho esa frase tan famosa de “ya no hacen electrodomésticos como los de antes”. Lo cierto es que tienen toda la razón. Se ha demostrado que marcas muy habituales fabricaban sus electrodomésticos para que, pasado un plazo de tiempo, dejaran de funcionar bien. O, directamente, al cabo de cinco o seis años renovaban los modelos y dejaban de fabricar repuestos para sus productos. Si estos se estropeaban, aunque fuera una tontería, tenían necesariamente que reemplazarse.
Pero hoy las normas han cambiado. La gran cantidad de residuos que se estaban generando obligó a las autoridades a cambiar las normas y obligar a que este tipo de prácticas se acaben. Hoy, ya puedes llamar a tu técnico de reparacion electrodomesticos Pontevedra y arreglar tus aparatos, ya que tendrán repuestos de forma obligatoria. Por poco dinero, volverás a tener tu electrodoméstico en plena forma y para mucho tiempo más.
Tal vez, nuestras lavadoras, lavavajillas o televisores no duren tres décadas, pero sin duda su vida útil será mucho mayor y podremos utilizarnos mucho tiempo si así lo deseamos. El medioambiente y también nuestros bolsillos van a agradecerlo. Solo falta cambiar esa forma de pensar que se ha incrustado en nuestro cerebro durante las últimas décadas y según la cual todo es de usar y tirar. Y ojalá la cambiemos rápido porque la contaminación está aumentando a pasos agigantados y es insostenible este nivel de consumo.
El siguiente objetivo está puesto en los teléfonos móviles, los cuales actualmente están pensados para que duren entre uno y dos años. Pasado este tiempo, se quedan desactualizados y no soportan ya los juegos o aplicaciones que solemos utilizar. Se pretende que un teléfono tenga una vida útil de al menos cinco años si no más. Y, para eso, tiene que poder actualizarse o mejorarse. ¿Te acuerdas cuando podías abrir tu torre de PC y añadir memoria o cambiar piezas? Seguramente no podamos hacer lo mismo con el teléfono, pero sin duda será una buena noticia que no sea necesario cambiarlo cada poco tiempo y que, si decidimos hacerlo porque nos apetece variar, podamos vender o donar el aparato viejo ya que seguirá teniendo valor y mucho uso por delante.